Preparados para pasar el Rubicón

Más o menos ese es mi sentimiento ahora, cuando ya he concluido los dos cursos que llevaba entre manos: el de locución y presentación en TV y el de la Unión Europea, los dos con gente de la que he aprendido mucho. Tanto en lo personal como en lo profesional, aunque un pedazo más de corazón está hacia las personas que conocí en la Escuela Diplomática. Un grupo magnífico formado por un 92% de funcionarios, un 4% de periodistas y otro 4% pertenecientes a diferentes campos profesionales: consultoría, desempleados activos, sociólogoso, filósofos, etc... Hay para todos los gustos, la verdad. Gracias a Violeta, Laura, Carmina, María (alias la organizadora y sacrificada opositora), José Luis (Profesor de Geografía de la Pontificia de Salamanca, leonés de Babia y de afilado verbo), Marío (el médico más cachondo que haya conocido), María de Burgos (un encanto de chica, muy emprendedora, sobrevivió a Accenture y eso tiene mucho mérito), Francisco (¡Pero que majos son los colombianos!) y un sinfín de nombres más. Algunos quizás compartan aula durante el próximo año, si sacan plaza en el famoso máster de relaciones exteriores... También concluí con la peña de la tele, más contenida, pero todos encantados de habernos conocido delante de las cámaras y detrás (¡faltaría más!). Un grupo con el que no me he aburrido nada, ciertamente. Malva, Miguel, Raquel, Carmen, Laura y Emely. La verdad, es que todos me han enseñado algo (y no es por peloteo): con su estilo, ilusión y, sobre todo, buen humor se han ido cayendo las hojas del calendario a una velocidad vertiginosa... Espero que algún día los vea a todos convertidos en unos excelentes profesionales, aunque diría que más de una la veo presentando dentro de nada (Raquel por sus tablas y capacidad de improvisación, Carmen en cuanto en Antena 3 se den cuenta del diamante en bruto que tienen). Miguel no lleva mala carrera, desde luego. Y Malva, pues como un servidor de Periodista intermitente... Situación de la que espero salga lo antes posible. ¡¡Sino que vuelva Hora Cero!!

En el aspecto social, las cosas andan bastante movidas porque Antonio ya es licenciado y lo celebramos este sábado con unos cuantos bailes y alguna buena vista alrededor nuestro. Pero vamos, de mujeres ya hablaré en algún post posterior.

Celebraciones, despedidas, cenas, ... recuperar el contacto con gente del cole (Kike, Pepo, Alberto...), conversaciones, algún encuentro inesperado (María, la chica de Alberto Moreno bis)... No sé, se puede decir que en estas fechas el amor fluye alrededor mío y no lo digo por un servidor. ¡No! pero esto de tener al 90% de las amistades enamoradas, hace que uno pueda estudiar con curiosidad exenta de malicia, ese mundillo de los pares. Uno, que tiene cierta vocación de sociólogo...

Por lo demás, vaya una disculpa por escrito a los de la sufrida Montaña. Pero el Infomisión me tuvo liado gran parte de la tarde y eso, que al final no salimos este martes sino el siguiente.

¿ Y el futuro? Como le comentaba a un amigo: "hay un curso sobre el islam que...". No, en serio

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Vienen tiempos de papeleo, currículums, de esperar llamadas y de mucha, mucha maquetación. ¡Sobreviviremos! Como siempre, el periodismo es esa droga esquiva que te deja la miel en los labios: remedio y enfermedad, un sevidor sigue con las ilusiones casi intactas aunque quizás más maduras. Hace tiempo que me caí de la nube...