Pues sí, este fin de semana ha sido algo movido. En dos días he estado en dos lugares muy diferentes, cubriendo dos eventos de muy diversa naturaleza. El sábado me tocó acercame a la presentación de una promoción de viviendas, construidas por una empresa constructora con fuerte arraigo en Guada, la cuestión era que a las 20 horas de la tarde se había organizado una gran merienda campera para clientes y amigos. La excusa no sólo el inicio de un desarrollo urbanístico en un paraje repleto de encinas centenarias, que serán protegidas aseguran, sino la inauguración de una oficina de promoción. Según la nota de prensa, todo muy bien comunicado con el AVE cerca y además en un lugar con unas vistas excelentes. No lo dudo, pero eso sería si acaso en 5/ 10 año, porque ahora es poco menos que un yermo con calles desiertas sin edificios ni ninguno de los 425 chalets pareados hechos, sólo los dos pilotos. De los bloques de vivienda en altura, ni rastro.
Resultaba surrealista ver a tanta gente con bocadillos y bebidas, sobre un cesped artificial y al fondo las obras de una incipiente urbanización con el terreno apenas desbrozado. Hablamos con el dueño de la constructora, echamos un vistazo a los chalets modelo y entrevisté a hipotéticos futuros habitantes de la Urbanización Villaflores. Y parece mentira, pero allí estuvimos casi todos los medios locales. Si es que don Dinero es gran señor...
Allí me enteré de los que significan términos tan sugerentes como "Viviendas de Iniciativa Pública Privada"- un invento de Barreda-, edificabilidad, Vivenda de Libre de Precio Protegido y demás expresiones, que a un servidor le hicieron perderse. En fin, que si tenéis 240.400 euros podéis haceros con un chalecito de 125 metros cuadrados y una parcelita de al menos 360. Ahora bien, el precio se basa en el de tasación, pero esto eufemismos aparte es vivienda libre y eso es carne de hipoteca.
Un par de perlas más que pudimos oir algún miembro de esa conocida inmobiliario alcarreña: "La crisis actual es más de liquidez, que de caracter inmobiliario" y "Anque el momento es difícil, no quiere decir que no se necesiten viviendas". Creo que resumen muy bien la filosofía de este sector tan castigado...
Por lo demás, ni mi compi Belén ni un servidor saqueamos comida alguna. Esta vez no fuimos de gorrones, sino a cumplir con un gran anunciante de nuestro periódico.
Así que ya sabéis, poned mucho dinero en publicidad y compraréis un cobertura digna del gobieron central.
Por cierto, salí las 10 y media de la noche y aún desconozco cómo llegué a la estación de cercanías, sita en el otro extremo de Guada...
PD: La foto corresponde a Sigüenza, el siguiente capítulo de mi crónica. ¡Hasta mañana!
No hay comentarios:
Publicar un comentario